La empresa segoviana ha dado a conocer la raza en la cumbre internacional de gastronomía celebrada de los días 25 al 28 en la capital.
Monte Nevado, una empresa segoviana situada en la localidad de Carbonero el Mayor, ha mostrado el cerdo Mangalica a todos los asistentes a Madrid Fusión. Cocineros, propietarios de restaurantes, cadenas hoteleras, catering y periodistas han descubierto de mano de esta empresa una raza autóctona húngara que se encontraba en peligro de extinción.
En la celebración del VIII encuentro gastronómico madrileño, que ha tenido lugar de los días 25 al 28 en el Palacio Municipal de Congresos del Campo de las Naciones, la entidad ha contado con un stand donde ha compartido experiencias e inquietudes con las más altas figuras internacionales del panorama gastronómico y de la alta cocina. Ha expuesto las características genéticas que identifican a la raza, ofreciendo el producto para su degustación.
Durante la conferencia “El secreto de un restaurante magnético”, celebrada el día 27 a las 17:30 horas, el director general de Monte Nevado, Juan Vicente Olmos, ha presentado, delante de un foro de unas 200 personas, las peculiaridades del jamón Mangalica. La raza húngara tiene unas propiedades físicas diferentes a las autóctonas españolas. Posee un pelo grueso y largo que se asemeja a la lana en invierno y que cambia en primavera por unas cerdas más finas. Su alimentación es natural a base de maíz, trigo y pastos, en un medio específico como es la estepa donde el animal pastorea. Esta raza llega al momento del sacrificio con “una madurez específica”, con “150 kilogramos de peso” y “el doble de edad” que un cerdo normal y esto “conforma la base de una materia prima ideal” asegura Olmos.
Monte Nevado, una empresa segoviana situada en la localidad de Carbonero el Mayor, ha mostrado el cerdo Mangalica a todos los asistentes a Madrid Fusión. Cocineros, propietarios de restaurantes, cadenas hoteleras, catering y periodistas han descubierto de mano de esta empresa una raza autóctona húngara que se encontraba en peligro de extinción.
En la celebración del VIII encuentro gastronómico madrileño, que ha tenido lugar de los días 25 al 28 en el Palacio Municipal de Congresos del Campo de las Naciones, la entidad ha contado con un stand donde ha compartido experiencias e inquietudes con las más altas figuras internacionales del panorama gastronómico y de la alta cocina. Ha expuesto las características genéticas que identifican a la raza, ofreciendo el producto para su degustación.
Durante la conferencia “El secreto de un restaurante magnético”, celebrada el día 27 a las 17:30 horas, el director general de Monte Nevado, Juan Vicente Olmos, ha presentado, delante de un foro de unas 200 personas, las peculiaridades del jamón Mangalica. La raza húngara tiene unas propiedades físicas diferentes a las autóctonas españolas. Posee un pelo grueso y largo que se asemeja a la lana en invierno y que cambia en primavera por unas cerdas más finas. Su alimentación es natural a base de maíz, trigo y pastos, en un medio específico como es la estepa donde el animal pastorea. Esta raza llega al momento del sacrificio con “una madurez específica”, con “150 kilogramos de peso” y “el doble de edad” que un cerdo normal y esto “conforma la base de una materia prima ideal” asegura Olmos.
El 60% del cuerpo del cerdo mangalica es grasa. Tiene tanta cantidad o más que uno ibérico para adaptarse al frío de la estepa húngara. Olmos ha afirmado que la situación de “peligro de extinción” que tenían los animales y “la calidad del producto” han hecho que Monte Nevado lleve 20 años importando jamones mangalicas.
La empresa segoviana ha buscado desde 1990 un cerdo de calidad fuera de las fronteras nacionales. Después de varios años de trabajo y estudio, haciendo una selección de los animales que quedaban, han encontrado una raza que reúne las cualidades que ellos mismos se exigían. El director de la empresa ha explicado que es un producto de “alta calidad” por la delicada infiltración de su grasa, lo que supone que sean cerdos con una maduración “larga y cuidadosa”, con los que se elaboran jamones de lenta curación para conseguir un “sabor especial y con carácter propio”.
Prestigiosos cocineros se han acercado hasta el stand de la empresa segoviana para conocer de primera mano la raza húngara. Algunos de los que se han interesado por el jamón mangalica fueron Sergio Arola, Manuel de la Ossa, Fernando del Cerro, Juan Pozuelo, Carlos Arguiñano y Ricardo Sanz, así como periodistas gastronómicos de reconocido prestigio como José Carlos Capel, Juan Manuel Bellver, Sacha o Eufrasio González.
La empresa segoviana ha buscado desde 1990 un cerdo de calidad fuera de las fronteras nacionales. Después de varios años de trabajo y estudio, haciendo una selección de los animales que quedaban, han encontrado una raza que reúne las cualidades que ellos mismos se exigían. El director de la empresa ha explicado que es un producto de “alta calidad” por la delicada infiltración de su grasa, lo que supone que sean cerdos con una maduración “larga y cuidadosa”, con los que se elaboran jamones de lenta curación para conseguir un “sabor especial y con carácter propio”.
Prestigiosos cocineros se han acercado hasta el stand de la empresa segoviana para conocer de primera mano la raza húngara. Algunos de los que se han interesado por el jamón mangalica fueron Sergio Arola, Manuel de la Ossa, Fernando del Cerro, Juan Pozuelo, Carlos Arguiñano y Ricardo Sanz, así como periodistas gastronómicos de reconocido prestigio como José Carlos Capel, Juan Manuel Bellver, Sacha o Eufrasio González.